5.6.07

Pequeña historia de cómo se hizo "El Asco"



Yo, el creativo muy atareado:

Tenía 25 años. Transcurría el año 2000, época en la que tanto Dante como yo todavía militábamos en las filas de La Productora. Todavía faltaban unos años para que arrancara mi “carrera profesional”, ya que recién en el 2003 comencé a publicar regularmente en Europa.

Por aquel tiempo todavía estaba buscando qué clase de historietas quería hacer. Lo último que había hecho se remontaba a un par de años antes, cuando todavía publicaba la revista Arkanov. La Productora se había puesto las pilas y habían comenzado a salir varias revistas. Pero yo seguía medio vago y nunca me decidía a comenzar mi propio proyecto. Estaba empantanado.

Por un lado quería empezar a trabajar para afuera, sin saber cómo hacer, pero por otro quería escribir algo urgentemente, para poder dar alguna señal de vida. Me molestaba ser el único de la Productora sin revista.

Finalmente cuando decido ponerme las pilas y sacar algo, ocurrió algo inesperado: conseguí trabajo. Había pasado varios años de desempleo o semiempleo permanente, pero por primera vez había conseguido un laburo formal, en una agencia de publicidad, como redactor creativo.

Laburaba de 9:00 a 18:00 hs y en cuanto llegaba a mi casa al anochecer, lo que menos ganas tenía de hacer, era seguir escribiendo en la computadora. Por un lado estaba feliz porque tenía mi sueldito, pero por otro me rompía las bolas pensar que ahora tenía la excusa perfecta para seguir sin escribir quién sabe cuánto tiempo más.

Así que tomé una resolución drástica. Si al volver del laburo estaba demasiado cansado para escribir, escribiría antes, a la madrugada, bien fresquito. Así fue que durante unos pocos meses me puse las pilas y me levanté religiosamente a las seis de la mañana. Prendía la computadora y me ponía a escribir.

Me propuse escribir una serie de novelas gráficas para ir publicando por la Productora. En aquel tiempo ya estábamos hablando de dejar de hacer revistas y encarar libros, más durables y sustanciosos. Lo primero que escribí fue “El Campito”, que la iba a dibujar mi amigo Gato, y como ya conté en otra ocasión, aún no terminó. Y luego, seguidamente, comencé con una historia medio rara que se me había ocurrido.

Al principio solo sabía que iba a haber un rengo y una ciega, y de hecho se llamaba así: Rengo y Ciega. Con lo poco que tenía en mente, y sin saber en qué iba a terminar, me puse a escribir, sin sinopsis previas ni planes muy detallados, instintivamente. De entrada supe que la iba a dibujar Dante, medio que caía de maduro, porque éramos amigos y compañeros en la Productora. El resultado me sorprendió, enseguida me di cuenta de que era un buen guión. Lo que nos estaba dando problemas era el nombre. Luego de pensar varios, nos decidimos por “Cruzar la Calle”.

Dante hizo una primer versión de las primeras páginas, en blanco y negro y un estilo más realista. La idea era hacer lo posible para venderla a España, y además publicarla en La Productora. Pero para este momento, ya habíamos llegado a finales del año 2001 y bueno, ya se sabe...

Mi sueldo se redujo a la mitad, y pasó a ser en patacones. Estaba todo mal. Ya no podíamos ni pensar en publicarla por la Productora, porque no teníamos guita ni para pagar el alquiler. La prioridad pasó a ser venderla a España.

Yo, el ansioso idiota:

Para mi sorpresa apenas se la mando a Edicions de Ponent, me dicen que les interesa, pero que recién podrían publicarla en el año 2005. En aquel momento para mi fue como si me dijeran que se iba a publicar veinte años después. Y les dije que no, que prefería seguir buscando. En fin, una idiotez de mi parte. La cuestión es que el año 2005 llegó y yo seguía buscando editor.

Durante esos años, pasó de todo. Empecé a trabajar regularmente haciendo historieta erótica, Dante y yo nos fuimos de La Productora, y llegó lo más importante en mi carrera profesional hasta el día de hoy: el primer contrato para Francia. Así fue que junto a Gabriel Ippóliti hicimos La Burbuja de Bertold, que luego ganaría varios premios y cosas.

En marzo de 2005, Laura es invitada a España por el libro “Historias Corrientes”, al evento Unicomic que se realiza todos los años en Alicante. Yo me hice invitar de prepo bajo la excusa de que era autor de historieta erótica. Y aproveché para armarme una buena carpeta de proyectos. Entre otros, estaba “La Grande Toile” que luego sería publicada por Albin Michel en 2006 y “El Muertero Zabaletta” que estamos haciendo actualmente para Norma Editorial.

Ante el apuro de tener que sacar nuevos proyectos para llevar, se nos ocurrió con Dante reversionar tanto el guión como el estilo de “Cruzar la Calle”. Lo corregí mucho, saqué y sumé partes, lo mejoré, bah. Pero había un problema, descubrimos que “Cruzar la Calle” era el nombre de una novela para adolescentes. Así que luego de miles de opciones, nos decidimos por “El Asco”.

Dante hizo cuatro páginas en tiempo record, esta vez con el estilo a dos colores que terminaría siendo el definitivo. Llevé la muestra de cuatro páginas de El Asco a Europa, con la plena confianza de que era una fija. Algo iba a salir. Pero al final, no le gustó a nadie. Evidentemente era una historieta maldita.

Yo, el autobiográfico:

La nueva muestra estuvo durmiendo casi un año, hasta que apareció el proyecto de Historietas Reales. Ni Dante ni yo teníamos muchas ganas de encarar algo autobiográfico, no era algo que nos atrajera, de hecho en un principio no íbamos a participar. Hasta que a Dante se le ocurrió de que podría salir El Asco. Una página por semana, hasta que se acabe.

Era una guachada, porque medio que nos cagábamos en la consigna, pero al mismo tiempo, era la única manera de que El Asco por fin viera la luz. Casi sin pedir permiso, nos mandamos a hacer el Asco. Bah, Dante se mandó. Yo el guión ya lo tenía escrito. Dentro del grupo, hubo quienes protestaron, y con razón. Así que negociamos. El resultado de la negociación fue que hiciéramos una historieta autobiográfica ADEMÁS de El Asco. Así fue como finalmente tomé coraje, agarré los lápices y empecé con Mi Vida es Sueño.

El resto es historia conocida y puede verse reflejada en los viejos post del blog de Autobiógrafo y luego en el blog de HR. El Asco tuvo un resultado que nos sorprendió a todos. No voy a hacerme el humilde, yo sabía que era una buena historieta. Pero el grado de respuesta de los lectores nos dejó patitiesos. Entrar a ver los comments cada martes se volvió una adicción inevitable. No me gustaba mucho participar de los comments, prefería seguirlos en silencio y a lo sumo agradecer al final.

Ahora estamos esperando que se concreten un par de puntas para la posible edición de El Asco. Yo confío en que tarde o temprano va a terminar publicándose en algún lado y el hechizo finalmente se habrá roto del todo. Ah, y por cierto, no hace tanto descubrimos que "El Asco" es el nombre de una historieta de Grant Morrison. No se gana para disgustos.

Por lo pronto, ya estoy escribiendo una nueva historia para publicar en la web. En un par de meses la podrán ver y el vicio se iniciará nuevamente.

Salutes!

D.